lunes, 9 de julio de 2007

La Generalitat se vuelca con el Sáhara al tiempo que Zapatero cierra la puerta a la ex colonia

ABC. Barcelona
Viernes, 6 de julio de 2007

Tripartito y PP catalán formaron ayer una extraña alianza en el Parlament para fijar el Sáhara Occidental como objetivo prioritario de la ayuda pública catalana en los proyectos de cooperación y desarrollo. Los propios miembros del tripartito, PSC, ERC e ICV, presentaron una enmienda al plan gubernamental que recibió el apoyo del PP con la que se expresa el posicionamiento político respecto al conflicto del Sáhara, en el que el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero ha variado la tradicional política de apoyo a la ex colonia española para acercarse a las posturas de Marruecos.

Aunque el plan aprobado por el Govern en un primer momento colocaba al Sáhara Occidental en un segundo nivel de prioridad, todos los partidos acordaron elevarlo al rango de país «prioritario» en la cooperación al desarrollo de la Generalitat, junto a Palestina, Marruecos -en la lista como país de origen de la mayor parte de la inmigración en Cataluña-, Mozambique, Senegal, Guatemala, Nicaragua, El Salvador, Bolivia, Colombia y Ecuador. El director general de Cooperación y Acción Humanitaria, David Minoves, admitió que la incorporación del Sáhara respondía a «una voluntad política» del Parlament, materializada a través de una enmienda ante la que CiU se abstuvo.

En cuanto a los «países y regiones preferentes» de la cooperación, el segundo grado de importancia que otorga el Govern, el Líbano sustituye al Sáhara Occidental y Gambia sustituye a Burkina Faso como país del que es originaria buena parte de la inmigración catalana. Minoves explicó que, como fruto también de las enmiendas incorporadas, el plan destacará países como Cuba, Kosovo, Afganistán, Chechenia, Kurdistán, Bosnia Herzegovina y Eritrea. Señaló que los tres grandes ejes en la política de cooperación serán «las identidades de los pueblos indígenas», el trabajo por «los derechos humanos y la democracia» y la cooperación «desde el ámbito local en los procesos de autogobierno».

El plan establece además que como mínimo el 50% de las ayudas públicas a la cooperación «deberán ser ejecutadas por la sociedad civil», lo que supone «un máximo del 50%» en el porcentaje de recursos públicos que serán ejecutados directamente por «organizaciones públicas catalanas o multilaterales, ya sea la Generalitat, ayuntamientos» u otros.

Fuentes:
*Embajada de la RASD en Argelia
*ABC.es

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