espacioseuropeos.com (24/11/2007)
El ministro marroquí de Relaciones Exteriores, Taieb Fassi Fihri, anunció el pasado miércoles, ante una comisión del parlamento marroquí, que la tercera fase de las negociaciones entre Marruecos y el Frente Polisario sobre el Sahara Occidental, podrían comenzar a finales de este año o enero de 2008.
En el transcurso de su intervención, Fassi Fihri expresó su deseo de que Argelia debería adoptar una "actitud positiva hacia la propuesta marroquí de autonomía para el Sahara Occidental". Según el ministro marroquí, “esta solución política de consenso, debería poner fin al conflicto del Sahara Occidental y conducir a la integración del Maghreb árabe".
Coincidiendo con estas declaraciones, el Secretario de Estado del ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación de España, Bernardino León ha manifestado que España es partidaria de una solución del conflicto del Sáhara Occidental “justa, duradera y mutuamente aceptable que respete la autodeterminación y sea negociada por sus protagonistas principales en el marco de las Naciones Unidas”.
Estas declaraciones las realizó León en su discurso de apertura del seminario que organizó el Instituto Europeo del Mediterráneo (IEMed) y el Centro Internacional de Toledo para la Paz (CITpax). Asimismo, el Secretario de Estado animó a las partes a “eliminar los obstáculos políticos que dificultan cuando no impiden la normalización de las relaciones bilaterales entre ambas orillas del Mediterráneo”.
Para él, la resolución 1.754 del Consejo de Seguridad de la ONU ofrece una oportunidad para “superar el estancamiento de varios años y avanzar hacia una solución justa y duradera que respete el principio de autodeterminación”. Pero, olvida el señor León que España sigue siendo la potencia administradora, que los Acuerdos de Madrid son totalmente ilegales y que lo que hay que hacer, en cumplimiento de la ONU, es el referéndum entre la población saharaui, además de exigir a Marruecos que de fin a su política de represión en el Sáhara Occidental.
Lo que el pueblo saharaui demanda y la comunidad internacional exige, no es autonomía ni autodeterminación, sino independencia y que las fuerzas de ocupación marroquíes abandonen de una vez el Sáhara Occidental.
Bernardino León, podía haber aprovechado tan magno y costoso evento, para dar cuenta de la venta de armas de España a Marruecos y de los acuerdos secretos que, con toda seguridad, existen entre los dos países.
Fuentes:
*POEMARIO POR UN SAHARA LIBRE
*Espacios Europeos
El ministro marroquí de Relaciones Exteriores, Taieb Fassi Fihri, anunció el pasado miércoles, ante una comisión del parlamento marroquí, que la tercera fase de las negociaciones entre Marruecos y el Frente Polisario sobre el Sahara Occidental, podrían comenzar a finales de este año o enero de 2008.
En el transcurso de su intervención, Fassi Fihri expresó su deseo de que Argelia debería adoptar una "actitud positiva hacia la propuesta marroquí de autonomía para el Sahara Occidental". Según el ministro marroquí, “esta solución política de consenso, debería poner fin al conflicto del Sahara Occidental y conducir a la integración del Maghreb árabe".
Coincidiendo con estas declaraciones, el Secretario de Estado del ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación de España, Bernardino León ha manifestado que España es partidaria de una solución del conflicto del Sáhara Occidental “justa, duradera y mutuamente aceptable que respete la autodeterminación y sea negociada por sus protagonistas principales en el marco de las Naciones Unidas”.
Estas declaraciones las realizó León en su discurso de apertura del seminario que organizó el Instituto Europeo del Mediterráneo (IEMed) y el Centro Internacional de Toledo para la Paz (CITpax). Asimismo, el Secretario de Estado animó a las partes a “eliminar los obstáculos políticos que dificultan cuando no impiden la normalización de las relaciones bilaterales entre ambas orillas del Mediterráneo”.
Para él, la resolución 1.754 del Consejo de Seguridad de la ONU ofrece una oportunidad para “superar el estancamiento de varios años y avanzar hacia una solución justa y duradera que respete el principio de autodeterminación”. Pero, olvida el señor León que España sigue siendo la potencia administradora, que los Acuerdos de Madrid son totalmente ilegales y que lo que hay que hacer, en cumplimiento de la ONU, es el referéndum entre la población saharaui, además de exigir a Marruecos que de fin a su política de represión en el Sáhara Occidental.
Lo que el pueblo saharaui demanda y la comunidad internacional exige, no es autonomía ni autodeterminación, sino independencia y que las fuerzas de ocupación marroquíes abandonen de una vez el Sáhara Occidental.
Bernardino León, podía haber aprovechado tan magno y costoso evento, para dar cuenta de la venta de armas de España a Marruecos y de los acuerdos secretos que, con toda seguridad, existen entre los dos países.
Fuentes:
*POEMARIO POR UN SAHARA LIBRE
*Espacios Europeos
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